1- Mejora tu calidad vida:
Porque estas alimentándote de mejor manera y nutriendo tu cuerpo, te ejercitas y mantienes es un estilo saludable. Por lo tanto, los cambios no solo se notan en el físico sino en tu estado de salud en general.
2- Fomenta tu autoestima:
No solo por verte diferente, sino porque te sientes diferente. Es el saber que te cuidas y eres responsable de tu bienestar.
3- Modificas tus hábitos:
Tus acciones cotidianas son más sanas, son una forma de autocuidado, te relacionas mejor con la comida, pues la eliges para nutrirte, la disfrutas sin dejarte controlar por ella. Al modificar tus hábitos, cambias tu vida en general. Es como si crearas un nuevo camino a seguir, que puedes enseñar a las demás personas.