La comparación ha estado presente en nosotros desde niños, tanto desde la perspectiva positiva de: "veo al otro como un ejemplo a seguir" o negativa pensando por ejemplo: "¿Por qué no tengo lo que tiene esa persona?". A parte de ello, hoy en día el auge de las redes sociales ha influido en la comparación negativa de muchas personas, al ver las vidas "perfectas" de los sujetos que pueden seguir en sus perfiles, sintiéndose mal consigo mismos, con su físico, personalidad, recursos, etc. Veamos 3 premisas que pueden ayudarte a dejar de compararte:
1- Al compararte te minimizas: Porque estas viendo a las personas como un rival, alguien que tiene más que yo, es decir, que tú estas por debajo de esa persona.
2- Las personas somos diversas: Es decir, todas estamos al mismo nivel, nadie es mejor o peor, simplemente somos DIFERENTES.
3- Aprecia tus potencialidades: ¿Que cualidades personales posees? ¿En que eres bueno? ¿Que te gusta físicamente de ti?
Finalmente con la única persona con la que puedes compararte es contigo mismo, con quien fuiste en algún momento.
¡TIENES POTENCIAL, CUALIDADES Y UN GRAN CAMINO POR CONTINUAR!