1- Toma tus medidas corporales: Puedes tomar la medida de tu cintura, cadera, muslo y brazo. A veces podemos no ser conscientes de los cambios físicos que estamos teniendo.
2- Lleva un registro fotográfico: Tomar fotos cada 30 días de frente, de perfil y otra de espaldas podrá permitirte hacer una comparación de tu progreso cada mes.
3- Cambios en la ropa: El sentir que la ropa nos sienta diferente, poder colocarnos ropa que tal vez no te quedaba, bajar tallas en la ropa o que no te quede apretada ¡esto es una buena señal sin duda alguna!
4- Tienes más energía y ánimo: Estas menos cansada durante el día, te sientes más activa y productiva, te sientes mejor contigo misma.